‘Conan el cimmerio. El coloso negro’, de Vincent Brugeas y Ronan Toulhoat

Editorial: Planeta Cómic.

Guion: Vincent Brugeas.

Dibujo: Ronan Toulhoat.

Páginas: 80.

Precio: 18,95 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Junio 2022.

Combatir el prejuicio es complicado. Eso es obvio. Si muchos lectores, siquiera algunos, están esperando algo concreto, ofrecer algo distinto tiene su riesgo. Pero a la vez es elogiable el atrevimiento en creadores que no dudan en salirse de los márgenes del camino para explorar territorios nuevos. Eso es lo que está sucediendo con el Conan francobelga que inauguraron Jean David Morvan y Pierre Alary con La reina de la Costa Negra (aquí, su crítica), álbum inaugural de Conan el cimmerio, título que se ha dado a una colección que aumenta con El coloso negro… y mantiene el buen nivel exhibido en su presentación. Cambia el equipo creativo, ahora nos ponemos en manos de Vincent Brugeas y Ronan Toulhout, y volvemos a ver a un Conan distinto. Esa es lo primero que llama la atención, que Conan el cimmerio no apuesta por un estilo único, sino por la libertad de sus creadores. Lógicamente, en la historia quien guía el viaje es Robert E. Howard, porque estas pretenden ser adaptaciones fieles de los relatos originales, también en su limitada extensión, pero en lo visual este bárbaro no es el mismo que vimos en La reina de la Costa Negra, ni tampoco será el mismo que veremos en próximas entregas de la serie. Pero sí es Conan, porque la esencia está ahí, viva y respetada, como debe de ser cuando se apuesta por algo pretendidamente fresco.

El coloso negro es, en muchos sentidos, una de las historias más bélicas de Conan. Está la magia oscura, por supuesto hay mujeres exuberantes, tipos duros y ambientes sórdidos y palaciegos, pero lo que destaca en estas páginas es el campo de batalla. Conan es un personaje cambiante, que fue aventurero, mercenario y marino antes de dar un salto más y convertirse en líder militar primero y rey después. Aquí es cuando se pone al fin al mando de un ejército, y es inevitable sentir que, por mucho que sea este el segundo relato que vemos en esta serie de cómics europeos, estamos viviendo en la madurez del protagonista. Eso está bien descrito por Brugeas, que aprovecha además las conversaciones con Yasmela, la princesa regente de Khoraja, para que esos aspectos de Conan estén muy bien asentados en la historia. Pero aunque a Conan aquí se le etiquete como el cimmerio, a nuestros ojos sigue siendo el bárbaro, y por eso el autor da tanto margen a las escenas de combate, sea el de ejércitos o el del propio Conan con quien está detrás de los males de la princesa. Con ese doble clímax, el ritmo que tiene este álbum es sobresaliente, y está a la altura de lo que necesitan el personaje y esta historia concreta, una que triunfa en lo general y en lo concreto, y que coloca a Conan a las puertas de nuevas vivencias.

Puede que sea por eso que se ha apostado por mostrar al cimmerio de otra manera, con un aspecto más adusto, más maduro, por qué no decirlo, más cercano al Conan rey que esperamos algún día que del Conan aventurero que en el fondo nunca deja de ser. Toulhoat, en todo caso, nos engancha desde lo más básico, desde la magia y la fantasía, con un poderosísimo trabajo de color, para después adentrarse en lo más propio de Conan, en el contraste entre las sucias tabernas y los ambientes palaciegos más exóticos. En todo sale más que airoso el ilustrador, y eso nos pone en el camino correcto para que después los clímax bélicos hablen por sí solos, cuando Burgeas se asoma a páginas sin diálogo en las que son las espadas y la sangre lo que de verdad marca el devenir de la historia. Y por si faltaba algún elemento, Burgueas corona el inevitable erotismo que tienen las aventuras de un bárbaro guerrero con el final de la historia. El coloso negro llega así a un final espléndido, como lo ha sido toda la lectura de su poco más de medio centenar de páginas. No es el Conan clásico de Marvel, tampoco el de Dark Horse, no es el de las películas y tampoco el que El Torres nos mostró con tanta genialidad en Sangre bárbara (aquí, su reseña). Pero es tan Conan como todos los anteriores, y eso es por respeto a todo lo anterior y por habilidad de sus autores.

Glénat publicó el segundo álbum de Conan le cimmérien, Le colosse noir, en mayo de 2018.

En nuestra galería de Facebook podéis acceder a todas las páginas que mostramos de todos los títulos que comentamos.