‘La fiesta de Delirio. Un cuento de los pequeños Eternos’, de Jill Thompson

Editorial: ECC.

Guión: Jill Thompson.

Dibujo: Jill Thompson.

Páginas: 64.

Precio: 8,95 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Septiembre 2017.

Es una delicia ver una serie tan adulta como el Sandman de Neil Gaiman (aquí, reseña de su primer volumen) teniendo una versión infantil tan maravillosa como la de Jill Thompson. Esa es la sensación que dejó El libro de cuentos de los pequeños Eternos (aquí, su reseña) y sucede exactamente lo mismo con la segunda mitad de este maravilloso díptico, La fiesta de Delirio. Poca gente tiene la capacidad de Thompson para contarnos, literalmente, un cuento tan agradable con personajes que están creados para generar sensaciones mucho más complejas. Pero es que, en el fondo, un cuento tiene que ser en primer lugar una buena historia, más cuando la fantasía juega un papel tan importante. Luego ya vendrán los personajes, y los que de verdad están bien escritos permitirán esa variedad de enfoques. Thompson, como Gaiman, es una narradora de primer nivel, y como tal hay que reconocerla, y es que escribir un cuento para los más pequeños es igual de difícil que las retorcidas historias de fantasía oscura que hicieron que los Eternos se convirtieran en parte esencial del imaginario popular del lector de cómics. Y en este caso la idea no puede ser más atractiva: para acabar con la infelicidad de Desesperación, Delirio decide montarle una fiesta en la que todos los Eternos han de participar con sus regalos.

Lo que resulta de este delirante punto de partida es un libro divertido, simpático, cálido y, en definitiva, bonito, apto para lectores de todas las edades (y eso, aunque suele decirse para que se entienda que los más pequeños lo pueden leer, en este caso va por los adultos, que lo van a disfrutar tanto o más que los niños). Y con un dibujo maravilloso. Están de moda las versiones más o menos juveniles y juguetonas de los personajes de cómic, más en merchandising que efectivamente sobre el papel, pero está claro que gustan. Quién sabe cuánto parte de culpa tiene Thompson en eso, pero sus Eternos son sencillamente encantadores y resulta imposible decir cuál de todos ellos es más adorable. Como buen libro ilustrado que es, las páginas de este cuento de los pequeños Eternos encajan perfectamente con las palabras que nos sirven para conocer la historia, son un acompañamiento perfecto, pero igualmente sirven de ilustraciones perfectas para ser disfrutadas en solitario, en un primer vistazo e incluso fuera del libro del que forman parte. La fiesta de Delirio es otra muestra de lo maravilloso que es el mundo de la narrativa fantástica cuando coinciden espléndidos personajes y autores de talento. Si te gusta Sandman, lo que hace Thompson con su mitología es imprescindible. Y si no, también se merece ese adjetivo.

Vertigo publicó originalmente Delirium’s Party: A Little Endless Storybook en mayo de 2011. No tiene contenido extra.

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