Guión: George R. R. Martin.
Dibujo: Luis Royo.
Páginas: 96.
Precio: 19,50 euros.
Presentación: Cartoné con sobrecubierta.
Publicación: Abril 2015.
Aunque George R. R. Martin tiene una experiencia en el mundo del cómic, escribiendo historias como Portales (aquí, su reseña) o viendo adaptaciones de sus libros como Juego de tronos (aquí, reseña de su primer volumen), lo primero que hay que advertir es que en El dragón de hielo no estamos ante uno. Es, en cambio, un libro ilustrado, y además ilustrado por uno de los grandes nombres del medio, Luis Royo. La mezcla es casi natural, y el relato corto de Martin en torno a lo que llama una niña del invierno que establece una conexión personal con el dragón de hielo que da título a la obra y las ilustraciones de Royo casan perfectamente. La fantasía que hay en la mente de escritor y de ilustrador concuerda de una manera muy armónica. Quizá se pueda pensar que en las primeras láminas que acompañan al texto hay poca conexión directa, mucho afán de mostrar al dragón (aunque, por otra parte, ¿quién puede quejarse viendo dibujos espectaculares de un dragón?) y no tanto a la niña protagonista, a Adara, pero en realidad esa sensación se produce en menos páginas de lo que pueda parecer. Y como ese defecto es muy menor, el disfrute es total desde los dos aspectos artísticos que se conjugan en el libro. La prosa de Martin es tan apetecible como en sus mejores novelas, claramente adaptada para que El dragón de hielo sea un relato para lectores de casi todas las edades pero sin abandonar su crudeza habitual y las ilustraciones de Royo reflejan bien las pretensiones del escritor.
Lo que nos interesa aquí por encima de todo, no obstante, es el trabajo de Royo, y la propia ilustración de la cubierta es ya una invitación a abrir el libro y vivir la historia con gran fascinación. Un dragón es siempre una extraordinaria vara de medir para un dibujante que quiera dedicarse al fantástico, y aunque Royo es ya un autor sobradamente conocido en el género que no necesita demostrar nada nuevo, su dragón es majestuoso y espectacular, siniestro desde su singular aspecto cristalino y poderoso en cada una de las poses que escoge el ilustrador para él. En la dulzura de Adara también encuentra Royo otro elemento con el que conectar de inmediato con el lector / espectador, y quizá sus mejores ilustraciones sean precisamente las que retratan tanto al dragón como a la pequeña, incluso puede que, por paradójico que parezca, sean las escenas en las que está la niña las que más destaquen, incluso aunque no aparezca la criatura mitológica. Y entre ellas, es imposible no fijarse en la última, la que cierra el libro y que podría ser el epílogo de historias de signo muy diferente, o aquella en la que Adara observa a los dragones oscuros desde lo alto de un árbol. El dragón de hielo es, de esta manera, una simbiosis tan adecuada que permitirá a los aficionados de Royo disfrutar con los textos de Martin, a los de Martin descubrir las ilustraciones de Royo y a los de ambos pasar un rato entretenidísimo entre sus páginas.
Tor Teen publicó originalmente The Ice Dragon en octubre de 2014. El volumen no tiene contenido extra.
Gracias por el dato, voy a leerme este comic. :3
Me alegro de que te sirva. ¡Pero atento, que no es un cómic sino un libro ilustrado!