Televisión – ‘Comando Monster’

Título original: Creature Commandos.

Directores: Matt Peters, Sam Liu.

Reparto: Indira Varma, Sean Gunn, Alan Tudyk, Zoë Chao, David Harbour, Frank Grillo, Maria Bakalova, Anya Chalotra, Viola Davis, Julian Kostov, Steve Agee,
Stephanie Beatriz, Peter Serafinowicz, Paul Ben-Victor, Robbie Daymond, Michael Rooker, Maury Sterling, Linda Cardellini, Jason Konopisos, Shohreh Aghdashloo, Benjamin Byron Davis, Gregg Henry, Joy Osmanski, Diedrich Bader.

Guion: James Gunn

Música: Kevin Kiner, Clint Mansell.

Episodios: 7.

Duración: 22-26 minutos.

Estreno: 5 de diciembre de 2024 – 9 de enero de 2025 (Estados Unidos) y España.

Cuando Disney compró Lucasfilm y, por tanto, la licencia de Star Wars, los ojos se pusieron en lo que J. J. Abrams hizo en El despertar de la Fuerza (aquí, su crítica), pero se olvidó que el primer Star Wars de Disney fue Rebels (aquí, su crítica). Pues bien, cuando se eche la vista atrás de algunos años, se verá Superman como el primer título del DC de James Gunn, pero en realidad ese honor lo tiene Comando Monster, algo blanda traducción de Creature Commandos, la serie de animación que ha escrito el propio Gunn y que él mismo ha querido afianzar como parte de su universo convirtiéndose en un personaje animado en la cabecera que abre la puerta a cada uno de los siete episodios de esta sustitución natural del ya consumido Escuadrón Suicida. Como carta de presentación de Gunn al público de DC es notable, porque vuelca lo mejor de su forma de entender la narrativa: la comprensión absoluta de los personajes que maneja. De hecho, toda la serie está pensada para ello, cada uno de los episodios se detiene en el pasado de cada uno de los protagonistas, lo que hace que salgamos de la serie viéndolos como mucho más que esos monstruos llamativos y frikis que acometen misiones suicidas para Amanda Waller. Son personas, con una trayectoria, con un bagaje… y, sí, con unos poderes que hacen de ellos unos seres extravagantes con los que jugar.

Y Gunn juega con ellos, lo hace con soltura, con elegancia, con muchas ganas de demostrar que no está en DC para aprovecharse de lo que ya se ha hecho, aunque sean evidentes las comparaciones entre este Comando Monster y cualquier encarnación previa del Escuadrón Suicida, sea el de cualquiera de las dos películas (aquí y aquí, sus críticas) o el de la reciente serie anime Escuadrón Suicida Isekai (aquí, su crítica). De hecho, es mucho más fácil emparentar Comando Monster con sus películas de Guardianes de la Galaxia (aquí, aquí y aquí, sus críticas) que con cualquier producto DC que hayamos visto hasta la fecha. Y quizá sea por eso que el reparto de la serie es formidable, porque Gunn tiene una capacidad de atracción espectacular. En ese sentido, es inevitable disfrutar como niños de lo que David Harbour hace con Frankenstein de los dos papeles de Sean Gunn, habitual en los universos de James Gunn, o con el siempre estimulante Alan Tudyk. Y qué demonios, con la inusual pero acertadísima elección de una actriz en sus 50, Indira Varma, para dar voz a la Novia, personaje que acaba convirtiéndose en el centro de casi todo lo que sucede en la serie. No hay voz equivocada en el reparto, y gracias a eso los personajes son todavía más humanos de lo que parecen en los guiones de Gunn.

¿La animación? Maravillosa. La animación tradicional para historias de cómic y superhéroes en un mundo que parece haberse decantado sin remedio por lo digital es algo que no puede perderse, porque los resultados son maravillosos. Como ya ha demostrado Invencible (aquí, reseña de su primera temporada), es un medio magnífico para este tipo de historias y un vehículo de lo más atractivo cuando, además, tienen el nivel desbocado de violencia que hay en Comando Monster. Muy desbocado, es bueno advertirlo, sobre todo para aquellos que puedan pensar que la animación dulcifica algo de este concepto. No lo hace, y de hecho actúa como catalizador de una experiencia audiovisual bastante única. Guardianes ya demostró lo mucho que gusta Gunn de insertar las canciones adecuadas para conseguir un efecto chocante y, aunque no sea desde la dirección de la serie, Comando Monster encaja muy bien en esa tradición. Es verdad que la trama de fondo puede ser un poco sencilla y que hay mucho de anticlimático en la resolución de la serie, pero incluso eso parece ser intencionado para que este título sea algo distinto y único con lo que echar a rodar un nuevo universo que parece ir más lento de lo que muchos creían. Si la espera se ameniza así, bienvenida sea, porque Comando Monster es un rato entretenida, loca e inteligente. Y con final abierto, claro.

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