Los 4 de CPT de julio

¿Qué puede haber mejor para las tardes de este caluroso julio que sentarse debajo de un aire acondicionado o un ventilador con un buen cómic en las manos? Pues para eso estamos, para hacer las recomendaciones oportunas, con nuestras reseñas de todos los días pero sobre todo con la selección que es Los 4 de CPT, esa lista de cuatro cómics que destacamos por encima de todos los que hemos reseñado durante el mes y que cada día 1, como hoy, os brindamos.

Todos los meses hacemos lo mismo para poneros en contexto, y este no va a ser una excepción, así que os recordamos que pinchando en los títulos de cada uno de Los 4 de CPT iréis directos a la reseña completa que publicamos en su momentos de cada uno de estos cómics. Y si queréis buscar todas las entradas que ya hemos publicado en esta sección o conocer nuestras elecciones de meses anteriores, lo podéis hacer mediante Twitter con el hashtag #Los4DeCPT y por aquí en el blog, en nuestro buscador de categorías, el que tenéis justo al final de esta página y de la página principal, como “4 de CPT».

Vamos a por ellos, ahí van Los 4 de CPT de julio:

Superman. Las cuatro estaciones, de Jeph Loeb y Tim Sale (ECC)

Puede que nos repitamos, pero cualquier edición de Las cuatro estaciones nos invita a recordar que estamos ante uno de los grandes tebeos de Superman. Jeph Loeb y Tim Sale formaron uno de los equipos creativos más estimulantes del cómic de superhéroes y dejaron unas cuantas joyas para los aficionados. Esta, una extraordinaria visión de Superman a los ojos de cuatro de sus personajes secundarios más importantes, es de las grandes. Tebeazo.

Manga, de Luis (Fandogamia)

Asistimos a lo que Luis nos muestra en Manga asombrados de todo lo que consigue en tan pocas páginas. Quizá eso juegue a su ventaja, porque al final es un carrusel de emociones con un impacto visual espectacular. Visualmente es brutal, y no se pierde en explicaciones innecesarias, ni siquiera por el hecho de ser parte de una personal trilogía que ha publicado con otras tantas editoriales distintas. Y son independientes, ojo, pero con vínculos temáticos claros. Esta es bestial.

La biblioteca de Turpín, de Max (La Cúpula / Brúfalo)

La memoria es caprichosa, pero cuando nos devuelve los recuerdos de la niñez pocas veces se suele equivocar. Cuando Max se asomó a las páginas del mítico El Pequeño País, nos dejó una aventura deliciosa que no solo era un espléndido cómic sino una gran carta de amor a la literatura clásica. La biblioteca de Turpín encuentra una edición maravillosa y que merece por lo que ofrece para lectores de todas las edades, para los niños de entonces y para los de ahora.

La carretera, de Manu Larcenet (Norma)

No es nada fácil adaptar un libro, y es mucho más complicado si es una novela como La carretera. Pero lo que Manu Larcenet hace con la obra de Cormack McCarthy es bestial, un torbellino de emociones en un mundo postapocalíptico dibujado con un nivel de detalle impresionante para rellenar todos los huecos que los diálogos dejan en esta depresiva epopeya de un padre y su hijo. La magnífica edición y su tamaño potencian el resultado de este brillante trabajo.