Guion: James Tynion IV.
Dibujo: Jorge Jiménez.
Páginas: 160.
Precio: 23 euros.
Presentación: Cartoné.
Publicación: Marzo 2024.
El cómic de superhéroes lleva ya algunas décadas en una dinámica que tiene sus riesgos. Cada historia, cada nuevo evento, nace con la vocación de ser algo definitivo. Y en realidad pocos pueden presumir de serlo. La guerra del Joker, desde luego, tiene esa vocación, hasta el punto de que James Tynion IV incluye esto mismo como uno de sus temas: a alguno de sus protagonistas ya no le vale con detener al Joker, necesitan algo más definitivo. La sorpresa, viendo esto y sin entrar en los detalles para no cometer spoilers, es que al final la conclusión del evento nos deja en una situación menos atrevida. En realidad, no puede ser de otra forma, en el cómic de superhéroes no es definitiva ni la muerte, con lo que cerrar temáticamente la eterna lucha entre Batman y el Joker es algo que no parece que DC vaya a permitir que se haga nunca dentro de la continuidad, solo en historias alternativas. El brío que le da Jorge Jiménez, desde luego, nos hace pensar que esta puede ser la historia que cambie para siempre estas normas, pero no es así. Y claro, entramos en el juego de las expectativas. Quien entre en La guerra del Joker buscando algo más tajante va a salir con la sensación de haber visto otra vez más de lo mismo, pero quien busque algo entretenido, dinámico y hasta malsano, va a pasar un buen rato, incluso aunque haya aspectos más que cuestionables en la historia.
La premisa de Tynion es lo suficientemente loca como para que entremos con gusto en el relato. El Joker se ha hecho con el control de Empresas Wayne y de su dinero y usa su nueva posición para generar el caos. Ya hemos visto antes a Batman sometido desde lo financiero y desde lo alucinógeno, cosas que vemos aquí, y Bruce Wayne ya ha estado socialmente despreciado en distintas ocasiones y por razones muy diversas, hasta acusado de asesinato. Por eso, hay más ambición que originalidad en La guerra del Joker y mucha más adrenalina que reflexión. De hecho, eso ayuda a que las flaquezas que pueda tener el relato queden en un segundo plano, y podemos meternos de lleno es una pelea sin fin entre dos fuerzas imparables. Es evidente que es un relato que tiene muchas ramificaciones, pero nos movemos aquí en el meollo central: hay secundarios, y tienen un papel fundamental en el clímax, pero esto es un juego de cuatro actores: Batman y el Joker, por supuesto, pero también Harley Quinn y Punchline. Con su simple mención, uno ya puede imaginar que hay una pelea de gatas, ineludible, en la que hay demasiado diálogo, que es quizá el punto más débil de Tynion como narrador. Sobran palabras, pero hay mucha adrenalina que sirve para dar forma al atrevimiento del escenario.
Y en eso, Jiménez pone mucho de su parte. Es muy interesante ver la notable versatilidad del ilustrador, que tan pronto se puede acoger al tono más aventurero y divertido del genero, como Los mejores superhijos del mundo (aquí, su reseña) como a lo más oscuro y retorcido, que es lo que se ve aquí. Su Batman impone, su Joker aterra, y sus Harley y Punchline tiene esa mezcla de sensualidad y locura que se espera de quienes han sido compañeras del Joker. La puesta en escena de Jiménez es notable, el hecho de que Batman tenga episodios alucinógenos le da muchas posibilidades, y utilizar trajes distintos del héroe (y del villano, un guiño más que divertido a… mejor nos lo reservamos…) le da muchos momentos de lucimiento que aprovecha bastante bien para que visualmente sí tengamos la sensación de esta viendo un blockbuster en toda regla. La guerra del Joker cumple, que no es poco, aunque es verdad que nuestra experiencia con los eventos va a marcar mucho lo que pensemos de esta historia. Parece que cuantos más años llevemos conectados al cómic de superhéroes menos impacto puede tener, pero quienes lleven poco tiempo siguiendo la actualidad de Batman seguramente disfrutarán mucho más de lo que parece más atrevido del movido planteamiento de Tynion y Jiménez.
El volumen incluye los números 95 a 100 de Batman, publicados originalmente por DC Comics entre septiembre y diciembre de 2020. El contenido extra lo forman las portadas originales de Jorge Jiménez y un portafolio de páginas entintadas del ilustrador.
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