‘Flash. La guerra de un minuto’, de Jeremy Adams

Editorial: ECC.

Guion: Jeremy Adams.

Dibujo: Roger Cruz, Fernando Pasarín, Serg Acuña, Lisandre Estherren, George Kambadais.

Páginas: 254.

Precio: 25,50 euros.

Presentación: Rústica.

Publicación: Diciembre 2023.

Los grandes eventos del cómic de superhéroes tienen un problema que afrontar antes de que nos pongamos a leer, y no es otro que encontrar un punto de partida que pueda resultar original y eficaz. Y en función de lo que cada lector entienda de conseguido en ese propósito es donde está la clave de todo. Flash. La guerra de un minuto tiene una premisa muy sencilla: una invasión alienígena por parte de un ejército que domina la fuerza de la velocidad. En la práctica, la idea de Jeremy Adams supone dos cosas. La primera, que solo la familia Flash es capaz de hacer frente a esa amenaza porque son los únicos que pueden alcanzar la velocidad necesaria para poder comportarse con normalidad. La segunda, que los poderes de los protagonistas quedan neutralizados. ¿Invalida eso el hecho de que sea este un tebeo de superhéroes? En parte sí, no vamos a engañarnos, porque tenemos a muchos Flash en el cuadro pero sin la opción de moverse a una velocidad superior, que es lo que les caracteriza como héroes. Y aún así es verdad que la historia, en términos generales, sabe cumplir con lo que se puede esperar de un evento de esta naturaleza, como poco tomándolo como una aventura más o menos refrescante. Quizá lo que marque la diferencia sea el nivel de drama que quiere alcanzar, tengo o no trascendencia al final, que en eso no vamos a entrar.

Forma parte un poco de lo mismo, en el deseo de sorprender al lector. Gustar es relativamente fácil, sobre todo cuando se trata de reunir a tantos héroes usando la fuerza de la velocidad,, héroes además que el lector conoce de sobra. Flash, desde casi siempre, desde que en los años 60 se redefinió al personaje con el origen de Barry Allen, ha tenido ese elemento muy presente, y La guerra de un minuto lo aprovecha bastante bien. Adams hace que el corazón emocional de la familia Flash sea un elemento esencial de la historia, el pegamento que da sentido a las muchas escenas de acción que hay, multiplicados por el alto número de héroes que reúne el evento. Hay un intento muy sincero de hacer que los villanos tengan poso, desde un buen prólogo a la historia que narra toda su base, pero es cierto que cuentan bastante más en esas páginas, en su propio relato, que una vez que entran en confrontación con los Flash. Afortunadamente, la parte más emocional consigue jugar un papel bastante relevante, y de hecho proporciona algunos de los mejores momentos de la historia, sobre todo cuando los protagonistas se sinceran de una manera más abierta. Puede parecer casi accesorio en una historia que apunta al gran espectáculo como motor fundamental, pero lo cierto es que es ahí donde mejor resultado se consigue.

El espectáculo, claro está, se garantiza con un buen apartado visual, y La guerra de un minuto puede presumir de ello con relativa facilidad, incluso aunque, como ya es habitual, sean hasta cinco los ilustradores que pasan por un evento que, para colmo, no se sale de la serie central de Flash más que para un especial, precisamente el que sirve para abrir el relato. Roger Cruz es el dibujante principal del evento, y maneja muy bien a todos los personajes, con el añadido además de que juega con ellos como personas y no tanto como manifestación de los poderes de velocidad que ya conocemos y que, recordemos, no se manifiestan en esta historia de manera visible. El estilo de Cruz, como el de Fernando Pasarín, es el que ahora mismo, en realidad desde hace ya bastante años, se espera en un cómic de superhéroes de este estilo. El que más se aleja en este volumen es George Kambadais, y deja unas página muy originales, que se degustan con mucho agrado, aunque solo sea por la novedad. La guerra de un minuto tiene elementos que funcionan muy bien, incluso que saben explicar que el combate esté contenido en un nicho tan concreto del universo DC (con ilustres invitados que, dicho con gracia, son carísimos floreros) y permita que lo personal tenga tanta fuerza como el más grandilocuente y épico de los combates.

El volumen incluye los números 790 a 796 de The Flash y The Flash One-Minute War Special, publicados originalmente por DC Comics entre marzo y junio de 2023. El único contenido extra son las cubiertas originales de Taurin Clarke, Serg Acuña, Daniel Bayliss, George Kambadais, Marco D’Alfonso y Yasmin Flores Montañez.

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