‘La formidable invasión mongola’, de Shintaro Kago

Editorial: ECC.

Guion: Shintaro Kago.

Dibujo: Shintaro Kago.

Páginas: 192.

Precio: 16,95 euros.

Presentación: Rústica con sobrecubierta.

Publicación: Octubre 2023.

Estamos muy acostumbrados a leer ucronías, relatos que parten de un cambio esencial en la Historia, pero Shintaro Kago lleva este concepto a un nivel tan distinto en La formidable invasión mongola que el mayor dilema que provoca es si merece la pena hablar abiertamente de ese punto culminante que imagina para hablar de la obra y de su impacto. Y es tan chocante lo que propone que vamos a apostar por no decir nada, siendo conscientes de que eso limita y mucho el análisis que se pueda hacer de la obra. Pero es que Kago es tan rompedor en ese punto de partida que no hay razón alguna para destripar la brutal y atrevida propuesta que hace, esta vez bien ocultada en la cubierta y sinopsis del libro. Sí podemos decir que partimos de los tiempos de Gengis Kan, es ahí donde se produce la transformación de nuestra realidad tal y como la conocemos. A partir de ese punto, Kago recrea la Historia de la humanidad en las fases que le llaman la atención y hasta llegar al siglo XX, generando sensaciones fascinantes y extrañas, porque por un lado parece un relato trascendente, que habla de los límites de la guerra y de la ciencia, pero por otro da la impresión de estar tan cargado de ironía y de algo tan distinto que no es sencillo clasificar lo que estamos leyendo salvo de esa manera, obviando cualquier etiqueta que pudiéramos pensar.

Kago es atrevido y en ocasiones brutal, pero sobre todo es minucioso. El mérito que tiene La formidable invasión mongola está precisamente ahí, en que por loca que pueda parecer su idea de base, y lo es un grado muy elevado, lo que acaba soltando es una línea temporal mostrada con mucho mimo y un nivel de detalle tremendo. Cierto es que, con las elipsis que propone, podríamos buscarle las cosquillas a su reconstrucción histórica, pero ese es un ejercicio que no merece la pena en absoluto. Lo que destaca, lo que llama la atención, lo que hace de este un manga tan sumamente atrevido es precisamente la convicción con la que se genera un escenario que tendría que parecernos absolutamente imposible. Kago lo hace cercano, grave y trascendente, y por eso no renta perder el tiempo con minucias que no afectan al ritmo ni a la lectura, sólo a los prejuicios que podamos traer a la obra una vez que su autor desvela en qué consiste ese cambio radical. Sobre ese instante pivota todo, y es verdad que define muy bien las intenciones de la obra, que se va convirtiendo en una escalada bastante atractiva en la que el lector no deja de pensar dónde va a poner Kago los límites de su idea. Y no, no los hay… De hecho, podría seguir o crear nuevos relatos intermedios, abriendo infinitas posibilidades.

En lo visual también, porque la idea de Kago es tan audaz en la representación del mundo que ha imaginado que necesita de una forma muy intensa de verse en cada página. Y sí, el gran mérito que tiene el dibujo de La formidable invasión mongola pasa precisamente por la verosimilitud que tiene todo, y no es nada fácil por la misma naturaleza de esa idea. Pero Kago hace que nos los creamos, que nos sintamos en el centro de un cómic bélico cuando corresponda, en uno científico cuando se trata de investigar esa novedad de la que no queremos dar más detalles, sin perder el foco en los personajes que va necesitando cada uno de los capítulos que forman la obra. Y como La formidable invasión mongola va de sorpresa en sorpresa mientras va apostando por un espectáculo que no está exento de épica y gran escala, lo único que podemos decir del manga es que cumple muy bien con los cometidos de cada uno de sus instantes de locura. Porque sí, es una locura insana, con un imaginario visual valiente, que casi remite a corrientes pictóricas vanguardistas más que a referentes más claros de manga o cine, que también podemos intuir. Pero sobre todo es algo muy personal, muy propio de su autor, terror adaptado a otro envoltorio con lo que provoca un desasosiego distinto a lo que estamos acostumbrados a ver.

Ohta Publishing publicó originalmente Chourdouryoku mouko daishurai en 2014.