‘Crisis en Tierras infinitas’, de Marv Wolfman y George Pérez

Editorial: ECC.

Guion: Mar Wolfman.

Dibujo: George Pérez.

Páginas: 400.

Precio: 47 euros.

Presentación: Cartoné con sobrecubierta.

Publicación: Junio 2023.

Hay algo tan mítico en Crisis en Tierras infinitas que es hasta complicado de explicar. Siendo sinceros, el intento de DC de acabar con los galimatías del multiverso que había montado durante años no salió del todo como esperaba. La monumental historia de Marv Wolfman y George Pérez no terminaba de suponer el punto y aparte necesario, por mucho que abriera la puerta a que creadores muy distintos entre sí nos contaran el origen de los personajes más importantes de la editorial. Pero el cómic de superhéroes, al menos el contemporáneo, nace aquí. Crisis fue el primer gran evento del género. Hizo historia. Y dejó una serie de momentos inolvidables desde un concepto que no ha hecho más que repetirse y honrarse en los nuevos eventos que no sólo ya DC ha ido sacando como anzuelo para que el lector caiga una y otra vez. Y digámoslo claramente, Pérez es una de las razones por las que la práctica totalidad de los aficionados al superhéroe sigue enganchando al género. Su manera de entenderlo es soberbia, pocos fueron capaz de lograr su maestría mostrando muchedumbres de tipos disfrazados con los más estrafalarios y coloridos trajes, cuando todos llevaban trajes de tela y no fornidas armaduras o tecnológicos complementos. Crisis en Tierras infinitas es parte del galimatías, pero es una parte irresistible.

Lo que sí es cierto es que Wolfman fue pionero en esto de hacer que el lector sienta que está en juego el destino del universo. La escala de la que dota a su relato es gigantesca y nunca da la sensación de ser menos que eso. No es algo fácil, y menos en una historia que se acerca a las 400 páginas y que en su publicación original se extendió durante un largo año, a diferencia de los eventos actuales, que se condensan en muy poco tiempo. Quizá eso es lo que hizo que el detalle se cuidara tanto. Por eso el carrusel de personajes con el que juega Wolfman es tan descomunal, por eso hay un sentido de tragedia real cuando se producen las necesarias bajas en un combate de estas dimensiones, como la de Supergirl que se convirtió en icono ineludible de Crisis desde la portada de Pérez. Y por eso, también lo podemos decir claramente, Wolfman logró el mayor retrato del universo DC sin que Batman estuviera de una u otra manera en el centro. Está, pero con los años ha sido el recurso fácil, poner al Caballero Oscuro en el eje de cualquier resolución a problemas que incluso exceden lo abarcable para él. Crisis no es así. En Crisis hay poderes cósmicos tan apabullantes que el mérito de Wolfman es hacer que todo eso descienda a una escala humana. Pero el superhéroe es así, es alguien que se lanza a por el peligro sin miedo, incluso cuando sabe que no tiene posibilidades de ganar.

Wolfman entiende el arquetipo de maravilla, pero lo de Pérez es algo que se sale de las tablas. Hay tanto que ver en Crisis en Tierras infinitas que ni siquiera leyéndolo una docena de veces podremos escapar a la sensación de que hemos descubierto algo nuevo. Sus páginas de multitudes son un deleite visual increíble, como lo es la imaginación que tenía a la hora de mover a estos personajes imposibles, saltando, volando o peleando, la iconicidad que les da en cada momento es maravillosa. Y eso, además, trabajando en un tamaño casi ínfimo para la escala de la historia, porque las splash pages quedan sólo para la presentaciones y para los cliffhangers con los que acababa cada uno de los números de la serie, respiros seguramente para un trabajo descomunal y laborioso de un Pérez que, aquí, estaba en un estado de gloria difícilmente repetible. Crisis en Tierras infinitas, con sus defectos, que los tiene, sigue siendo un clásico reverenciable y un título fundamental para entender la historia del cómic de superhéroes, en especial la que se ha desarrollado en los últimos cuarenta años, porque casi todo lo que se ha hecho después bebe de una u otra manera de la creación de Wolfman y Pérez, que nos dejaron un tebeo de los que hay que leer y de los que se puede disfrutar por mucho tiempo que haya pasado, además de una marca explotada por DC hasta el infinito.

El volumen incluye los doce números de Crisis on Infinite Earths, publicados originalmente por DC Comics entre abril de 1985 y marzo de 1986. El contenido extra lo forman una introducción de Marv Wolfman, una conclusión de Dick Giordano, un portafolio de bocetos y páginas a lápiz y las portadas originales de George Pérez y la de Alex Ross para una posterior edición.

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