Autor: David Heredia Pitarch.
Páginas: 280.
Precio: 25,95 euros.
Presentación: Rústica.
Publicación: Octubre 2022.
Cada vez hay más literatura sobre cómic, más ensayos sobre obras y trayectorias y sobre autores, y cada vez se siente como más necesario que ese ya interesante fondo que están construyendo las editoriales españolas se expanda todavía más. Es una delicia leer todo lo que ofrece David Heredia Pitarch en Osamu Tezuka. El don de la imaginación porque el suyo es un repaso formidable sobre vida y obra de uno de los más grandes nombres del medio, no en vano conocido como el Dios del Manga. Y eso que, en buena medida y precisamente por su procedencia, es posible que para muchos lectores sea todavía un nombre más desconocido de lo que su gigantesco trabajo tendría que haber provocado no solo ya en Japón sino en todo el mundo. No nos vamos a atrever a decir que Tezuka no está instalado con todo el derecho del mundo en una suerte de olimpo autoral, pero sí que hay muchas de sus obras y de las adaptaciones a la pequeña y a la gran pantalla que se hicieron que no tienen la difusión que seguramente merecen. Y eso hace que el ensayo de Heredia Pitarch sea valioso, porque refuerza lo conocido y potencia lo que la historia ha dejado un poco más oculto, porque nos cuenta quién era Tezuka y los porqués de cada una de sus obras, trazando un viaje fascinante y cronológico que absorbe e hipnotiza por la descomunal riqueza e imaginación que presenta.
La misma estructura del libro hace que este sea una consulta maravillosa. Casi en cada página hay una suerte de sumario con las ideas más relevantes, lo que traza una especie de minilibro dentro del libro, y se destacan en recuadros los personajes más importantes nacidos de la imaginación de Tezuka, creando una segunda manera de aproximarse a este volumen. Estas dos son tácticas narrativas que uno pudiera esperar en libros de una mayor extensión, pero Heredia Pitarch se extiende lo justo en cada momento de la vida y obra de Tezuka para que consigamos entender su importancia sin caer en la reiteración. Y dando espacio a todo lo que es relevante, sin dejarse apabullar por las creaciones más trascendentes, Astroboy a la cabeza, para que estas se lleven más páginas. No, El don de la imaginación es un libro equilibrado y podríamos decir que hace justicia, como lo demuestra ya en su misma portada, con todos los héroes y protagonistas que se inventó el Dios del Manga. Y se haya leído o no cada obra referenciada, hay una sensación de comodidad bastante grande en la forma en la que se acerca a estos títulos y personajes. Desde luego, este libro es una espléndida manera de conseguir que Osamu Tezuka suena mucho más actual de lo que la cronología real de su obra tendría que indicarnos, y eso, incitarnos a leerle, es un mérito enorme.
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