‘Barbarella’, de Jean-Claude Forest

Editorial: Dolmen.

Guion: Jean-Claude Forest.

Dibujo: Jean-Claude Forest.

Páginas: 184.

Precio: 29,90 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Marzo 2023.

En una época en la que parece que lo tenemos todo a nuestra disposición, sigue habiendo rincones que cuesta creer en el mundo del cómic. ¿Cómo es posible que Barbarella, la original, la de Jean-Claude Forest, lleve más de medio siglo inédita en España? Hablamos de un icono que la película protagonizada por Jane Fonda convirtió en universal, por mucho que fuera Brigitte Bardot el mito cinematográfico que inspirara en realidad a Forest para la creación de su heroína de papel, y por eso es sangrante que sus aventuras originales no hayan estado realmente a disposición de los lectores para deleitarse con ellas. Porque son un deleite, no podemos ni queremos negarlo. Al contrario, queremos destacarlo como lo que es, una delicia sesentera, una sublimación del erotismo de ciencia ficción en el que se combinan los más imaginativos escenarios y criaturas con una facilidad para desprenderse de la ropa que la protagonista afronta con una ingenuidad de lo más sugerente y divertido, y que por mucho que Forest se considerara un dibujante del montón tiene un acabado delicioso, con una línea clara y un blanco y negro con el que casi parece que el color nos asalta con la misma facilidad que lo hace la ya mencionada película de Barbarella (aquí, su crítica), que tiraba por ideas un poco más juguetonas cuando Forest añadía un pequeño extra más.

Recordemos, estamos en los años 60. En la contraportada se recuerda el famoso lema de “haz el amor y no la guerra”, y es cierto que la base de Barbarella está ahí, en llevar esa idea al límite. Barbarella no enarbola banderas blancas, sino su propia desnudez, y el sexo que no se llega a ver porque Forest nos lo esconde en divertidas elipsis es vitalista y placentero, aunque tampoco esquiva ciertas tendencias sado a la hora de poner en aprietos a la protagonista, aunque de una manera algo ligera que no afecte al tono general de las aventuras que contiene este libro. Es bastante fácil entrar en el juego que propone Forest, es tan sencillo sentir al mismo tiempo la exuberante carnalidad de Barbarella y el brillante escenario de ciencia ficción que propone, que casi da la sensación de que hemos leído estas historias una y mil veces. Uno de los peligros del erotismo es que ha cambiado tanto en las décadas posteriores que siempre es una amenaza de caducidad para historias desarrolladas en un momento concreto, pero Forest lega algo distinto. No es fácil explicar por qué, pero este erotismo, sabiendo cuándo nace, no se ha quedado atrás, no es antiguo ni rancio, y hasta tiene ciertas intenciones de liberación sexual femenina que encaja muy bien en estos tiempos en los que estas cuestiones siempre están sujetas a debate.

Y volvamos al dibujo de Forest. Es imposible que un cómic erótico, y este lo es aunque se pueda clasificar también en la ciencia ficción que le sirve de escenario, salga adelante si visualmente no logra sus objetivos. Forest, lo hemos dicho, se fija en Bardot, y eso habla de una voluptuosidad más que palpable ya en la misma génesis del personaje. Su desarrollo está a la altura, y Barbarella es la bomba sensual que tiene que ser. Y decimos sensual antes que sexual precisamente porque los encuentros sexuales se omiten con inteligencia y picardía, aunque todos sepamos que se han producido y cómo han acabado, pero todo depende de la mirada que cada lector quiera aplicar a la obra, porque Barbarella tiene esa doble intención para que la imaginación ayude en su lectura. Obviamente, es un tebeo para voyeurs, pero también para quienes disfrutan de esa ciencia ficción exótica e ingenua que abandera con tanta naturalidad. No todos los autores pueden presumir de haber creado un icono a lo largo de su trayectoria, siendo mejores o peores, y Forest es uno de los que sí lo pueden hacer. Cuánto debemos los aficionados de la fantasía a Barbarella, aunque no hubiéramos tenido a mano esas aventuras tan influyentes. Ahora lo podemos leer, ver y comprender con mucha más facilidad, gracias a una edición soberbia de estos cómics.

El volumen incluye páginas publicadas originalmente en la revista V Magazine entre marzo de 1962 y enero de 1964. El contenido extra lo forman una introducción de Ángel de la Calle, diversos artículos ilustrados sobre la obra, páginas de otras ediciones retocadas, una galería de portadas de Jean-Claude Forest, un epílogo de Jesús Palacios y otro de Javier Rodríguez.

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