‘La chica del mar’, de Molly Knox Ostertag

Editorial: Astronave.

Guion: Molly Knox Ostertag.

Dibujo: Molly Knox Ostertag.

Páginas: 256.

Precio: 19,95 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Junio 2022.

Si lo que se pretende contar en La chica del mar es, como dice su contracubierta, una historia de amor, anhelos e identidad, el mayor acierto entonces de Molly Knox Ostertag está en que su protagonista sea una adolescente que tiene distintas presiones, las familiares y las de sus amigas, las de la condición sexual que está descubriendo y la del divorcio de sus padres, la de pequeños detalles que podrían ser por separado la base de una historia propia pero que juntas añaden una dimensión realista bastante interesante y sincera. Cierto es que todo lo que se cuenta a su alrededor tiene muchos paralelismos esenciales con el cuento de La sirenita, especialmente en la popular versión de Disney por el tono juvenil que tiene, pero la frescura con la que se aborda la historia de Morgan es más que suficiente para que el cómic de Ostertag se disfrute como lo que es, una fábula moderna en la que una muchacha de quince años hace planes y la fantasía se los va cambiando poco a poco. Y la ventaja que tiene es que puede verse como un tebeo juvenil de apariencia simpática y desarrollo más o menos amable, pero tambien entenderse como un acertado reflejo de una realidad con la que muchos quinceañeros podrían identificarse, que funciona bien por sí sola y también conjuntada con la fantasía que tiene el relato.

Más que la originalidad, es verdad que se le pueden sacar referentes obvios como el ya comentado, lo que merece la pena en La chica del mar es el cocinado que Ostertag le da a los elementos que utiliza para crear el cómic. Es un relato que trata sobre salir del armario, es más que evidente que ese es el principal conflicto que atañe a la protagonista sin que su resolución sea propiamente el clímax del tebeo, y eso hace que estemos ante un título que es importante que exista aunque no debería serlo en el año en el que nos encontramos. El gran acierto de la autora en ese sentido está en que no considera la homosexualidad de su protagonista como un fin en sí mismo, sino como una condición más de un personaje adolescente complejo y nada complaciente. De esa forma, evita cualquier tipo de oportunismo y se adentra en los terrenos del realismo, en los que es fácil sentir empatía por la protagonista tanto en el arranque de la obra, cuando se esconde para encajar socialmente, como en la transformación que vive a lo largo de la obra. Adoptar un lenguaje adolescente, conversaciones de WhatsApp incluidas es la mejor de las guindas en ese sentido, porque hace que la inmersión en este mundo sea tan sencilla como para aceptar la existencia de criaturas fantásticas que salen del mar y pueden adoptar forma humana si hay una razón para quedarse en tierra, en este caso el amor.

Ostertag completa la cercanía de la que hace gala su trabajo con un dibujo muy simpático, dicho esto en el mejor de lo sentidos y sin atisbo de condescendencia. Personajes amables, con rasgos muy identificables, lo que también sirve para separar la fantasía de la realidad, que también hace falta para que no se pierda el foco de la historia, y entornos cálidos, también logrados a través del color de la obra. La idea hace que todo se mueva en la sencillez necesaria para que no perdamos de vista lo importante, en este caso la historia, el conflicto que tiene la protagonista con sus diferentes problemas, y el mundo interior del personaje central. Y eso, aunque pueda parecer que el dibujo es demasiado sencillo para lograr que se vaya más allá de la aventura, lo cierto es que sirve bien a los objetivos del relato. La chica del mar es un tebeo atractivo en su fondo y en su forma, uno que habla de realidades más o menos comunes aunque haya un componente de ciento, y sabe transmitir su mensaje semana manera clara pero inteligente, sin caer en los lugares comunes que afectan al relato. Todo ello cargado de buenas intenciones, aunque sin necesidad de edulcorar en exceso su mensaje sobre el amor, la amistad, la adolescencia y los hogares rotos, que de todo eso hay en estas páginas. Un buen trabajo con buenos mensajes para su público juvenil.

Scholastic publicó The Girl from the Sea en noviembre de 2021.

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