‘Holms y Piorot’. El caso de los cadáveres exquisitos’, de Jali

Editorial: Diábolo.

Guion: Jali.

Dibujo: Jali.

Páginas: 150.

Precio: 17,95 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Noviembre 2021.

Si pensamos en los mejores detectives de la ficción narrativa, seguramente rozaríamos la unanimidad con dos nombres, los de Sherlock Holmes y Hércules Poirot. No eran perfectos, pero las criaturas de Sir Arthur Conan Doyle y Agatha Christie se han convertido es imágenes ideales, míticas y rocosas. Son los detectives capaces de resolver los casos más complicados y de atrapar a los malhechores más inteligentes. ¿Y hay algo más parodiable que la perfección? Bienvenidos a Holms y Piorot, la caricatura que hace Jali y que se presenta con El caso de los cadáveres exquisitos, la primera de ojalá muchas aventuras que une a estos dos detectives, divertidas revisiones de los dos nombres ya mencionados, a los que el autor da una modélica historia de origen. Modélica, en primer lugar, porque cumple con acierto con el obligado requisito del primer encuentro entre ambos, pero sobre todo porque sabe mezclar sus dos casi antagónicas personalidades para que el misterio y su resolución se desarrollen de manera adecuada, pero también para que eso mismo nos vaya convenciendo, sin forzar, de que Holms y Piorot hacen una magnífica pareja de detectives protagonizando una buddy movie divertidísima que sabe sacar partido de todas las circunstancias que hacen de Holmes y Poirot las dos leyendas que son.

Jali se toma todo el tiempo que necesita para contar su historia, y eso, que es muy bueno para el ritmo, se nota sobre todo al principio, cuando tiene que presentar a sus dos protagonistas de manera individual. Ahí es cuando él mismo se demuestra, y nos lo enseña de paso a los demás, que su humor funciona. El salto de calidad, eso sí, se produce cuando vemos a Holms y Piorot juntos, porque ahí es cuando queda claro que la propuesta es más que válida. No es que la caricatura de personajes clásicos sea algo nuevo, pero se nota que está hecha con cariño, algo fundamental para que lectores clásicos de los dos detectives aceptan la broma de buen grado y para que quienes no hayan recurrido nunca a los libros originales se planteen si Jali ha caricaturizado en El caso de los cadáveres exquisitos algo que ya estaba en las letras de Conan Doyle y Christie o si, por el contrario, ha rellenado los huecos de una manera francamente hábil. El autor les da a sus dos detectives un caso divertido y juguetón, entretenido de principio a fin, un reto para sus mentes deductivas… y para las del lector, que por el hecho de que estemos ante una divertida comedia no tiene por qué quedarse al margen de la resolución del problema. Que Jali lo etiquete como folletín gráfico no hace más que aumentar el cariño que despierta la obra durante su lectura.

Si la caricatura es evidente en la propuesta, lo es también en el dibujo. Y si el libro es divertido por lo que nos cuenta para versiones a los dos maestros detectives de los que no paramos de hablar, su caricatura gráfica es espléndida. Jali juega con sus elementos más básicos, los que nos van a llevar a aceptar los personajes de una forma primaria, desde el sombrero de Holms al bigote de Piorot, pero los desarrolla con más habilidad de la que pueda parecer en un primer vistazo, uno que siempre va a ser un poco más simplista de lo que necesita el trabajo del autor. Porque Jali pone muchos detalles en su trabajo, con una puesta en escena mucho más cuidada de lo que puede sugerir el plano fijo con el que trabaja o la abundancia de primeros planos. Podríamos seguir hablando de las excelencias de El caso de los cadáveres exquisitos durante horas, porque lo cierto es que Jali sale más que airoso de todos los retos que se propone en su divertido folletín, pero nos vamos a limitar a recomendaros que os sentéis en un sillón orejero como los que usan Holms y Poirot, cojáis el volumen, lo abordéis con mente abierta y con ganas de disfrutar de dos personajes clásicos desde una perspectiva diferente y paséis un rato espléndido. A ver si de esa manera conseguimos que Jali nos ofrezca nuevos casos de este dúo.

El contenido extra lo forman un portafolio de bocetos y un epílogo de Jordi Canyissà.

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