Se nos va 2021 poco a poco, y ya hemos consumido el mes de noviembre. Y como es 1 de diciembre, toca el repaso de Los 4 de CPT, nuestra selección de cuatro cómics de entre todos los que hemos comentado durante los últimos 30 días, esos que os recomendamos encarecidamente porque merecen una lectura, esa oportunidad por la que clama cualquier cómic que aparece en las estanterías de una librería.
Antes de ir al lío, os recordamos una vez más cómo funciona esta selección. Pinchando en los títulos de cada uno de Los 4 de CPT iréis directos a la reseña completa que publicamos en su momentos de cada uno de estos cómics. Si queréis buscar todas las entradas que ya hemos publicado en esta sección o conocer nuestras elecciones de meses anteriores, lo podéis hacer mediante Twitter con el hashtag #Los4DeCPT y por aquí en el blog, en nuestro buscador de categorías, el que tenéis justo al final de esta página y de la página principal, como “4 de CPT».
Y ya, sin más dilación, estos son Los 4 de CPT de noviembre:
Whodunnit?, de El Torres y Vicente Cifuentes (Karras)Si dos autores tan buenos se juntan para hacernos un tebeo que les hace tanta ilusión hacer, ¿qué puede salir mal? En Whodunnit?, desde luego, poca cosa. Una historiad e investigación divertida, dinámica, que homenajea géneros y arquetipos, que nos tiene pendientes de todo lo que pasa en sus páginas hasta que sus animales antropomórficos resuelven el crimen que motiva todo este juego. Delicoso.
De Senectute, de Quino (Lumen)Pocos autores se sintieron con tantas ganas de contarnos cómo es la vida como se ve en las viñetas de Quino. Y Quino tenía mucha más vida lejos de Mafalda, su creación más popular. De Senectute nos lo recuerda, porque es una colección de tiras enlas que el autor nos habla de la vejez, del paso del tiempo, de cómo ve la sociedad a sus mayores, de sus miedos e ilusiones tardías, de sus decepciones. Es un libro demoledor.
El tapiz de los dragones de té, de Kay O’Neill (La Cúpula)Poco a poco, Kay O’Neil está construyendo un universo tan bonito que no podemos dejar de maravillarnos con cada una de sus entregas. Desde fuera, en una mirada superficial, pueden parecer tebeos sencillos, incluso infantiles dicho esto desde la peor de sus acepciones, pero cada nueva página es una sorpresa. Qué manera tiene O’Neil de hablar de emociones y sentimientos desde un mundo de fantasía soberbio. Una pequeña joya.
Jazz Maynard 2. Cuarteto Noir, de Raule y Roger Ibáñez (Diábolo)El final del viaje merece reconocimiento. Jazz Maynard se quedó aquí, en su séptimo álbum, y su trayectoria es brillante. La serie de Raule y Roger brilla con luz propia, y es brutal que lo siga haciendo en su versión de lujo y en blanco y negro. Con el color no se va ni un ápice de su mérito, de su acertada construcción de personajes, de su retrato de un mundo duro y cruel y de su apabullante estilo visual. Al contrario, crece.