Título original: Nancy in Hell.
Director: Aaron Warwick.
Reparto: Bianca Bradey, Dean Kyrwood, David Macrae, Brayden Dalmazzone, Steven Carnuccio, Tia Naris, Mardi Edge, Tim Stiles, Shaun Rovert Foley.
Guión: Jennifer Van Gessel.
Música: Paul Williams Dawkins, William Patrick Lloyd.
Duración: 5 minutos.
¿Cómo? ¿Por fin una película de Nancy in Hell? ¿La macarra serie de El Torres sobre nuestra dura rubia armada con una motosierra en el infierno tiene por fin la versión que se merece? No, por desgracia no, seguimos deseando que esa película fuera una realidad, pero este corto de Aaron Warwick sirve para que nos podamos hacer una idea de lo divertido que podría ser que alguien se atreviera a buscar entre las creaciones de El Torres para darnos un par de horas de desenfrenada locura. Estamos hablando de un corto, de una carta de presentación, de una simpática introducción a este mundo y sus personajes en la que si hay algo que podemos destacar es que realmente estamos viendo Nancy in Hell. Asumimos las limitaciones que tiene una producción de este nivel y que nos falta ver buena parte de ese infierno que el autor español ha desarrollado en sus cómics, pero el toque salvaje lo tiene, Bianca Bradey luce como una Lucy brillante y perfecta para el papel, cuando fuma, cuando bebe y cuando coge la motosierra, como si estuviéramos ante una Margot Robbie alucinógena que se hubiera perdido en un bar de carretera imaginado por Robert Rodríguez, por su aspecto y por su música, y con ese toque de cómic que se aleja del de Sin City (aquí, su crítica), una referencia más que palpable, pero que sabe entenderlo para llevarlo a este universo de El Torres.
En apenas cinco minutos, y sin salir de la noche en la que Nancy se ve arrojada al infierno y del bar cutre en el que se encuentra dentro de ese reino de pesadilla, el gran logro de este corto es que logra captar la esencia del cómic que adapta (aquí, reseña de su primer volumen). No lo copia salvo en lo que necesita, y seguro que cada lector tiene en la cabeza su propia imagen de Nancy, pero es difícil no ver esta pieza como una adaptación fiel al espíritu del cómic. No hay margen en tan corto espacio de tiempo como nos da esta Nancy in Hell para saber cómo se desarrollaría el infierno o la historia de su protagonista, pero la puesta en escena es justo la que necesita. Hay comedia en su violencia, y eso le sienta bastante bien, con un uso ideal de la velocidad de cámara cuando la secuencia lo necesita y de los efectos de sonido para añadir algo distintivo y divertido. Y sí, la carga final de Bradey motosierra en mano es la guinda del pastel. Lo amargo es que, de momento, esto se haya quedado ahí, porque es fácil imaginar la diversión que podría seguir si esto, en realidad, fuera un teaser de algo mucho más grande, da igual película que serie porque El Torres ha dejado ideas suficientes para que se desarrolle de cualquiera de las dos maneras. Si con barreras económicas y de metraje esto es lo que tenemos, qué pena que no haya más, porque disfrutaríamos como enanos.
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