Guión: Christophe Arleston.
Dibujo: Alessandro Barbucci.
Páginas: 160.
Precio: 32 euros.
Presentación: Cartoné.
Publicación: Enero 2020.
Si hay un integral, eso quiere decir que la serie es buena y, seguramente, que ha vendido bien, por lo que ahora se busca una nueva vida entre los lectores completistas que quieran hacerse con todas las ediciones posibles por los extras que puedan tener y entre quienes hayan oído hablar vagamente del título y quieran aprovechar esta opción un poco más económica para tenerlo en sus estanterías. Las dos valen para Ekhö, mundo espejo, la espléndida y divertidísima serie de Christopher Arleston y Alessandro Barbucci que nos transporta a una dimensión paralela en la que no hay electricidad, en la que hay misteriosos seres por todas partes y a la que viajan una joven veinteañera Fourmille, que en este nuevo mundo descubre que tiene la habilidad de acoger los espíritus de los muertos, y Yuri, su compañero de asiento en el avión del que desaparecen por arte de magia. Caos, locura, picante, humor… La verdad es que Ekhö es una de esas series en las que es facilísimo entrar por la cantidad de cosas que ofrece y que se va reinventando álbum a álbum por los escenarios que busca para cada una de sus aventuras, desde Nueva York a Hollywood, pasando por París, todos ellos cargados de referencias a nuestra realidad para que nos riamos todavía más y con una enorme imaginación para que los elementos propios sean maravillosos.
Arleston, desde luego, ha atinado en todo lo que se ha propuesto. La química que hay entre Fourmille y Yuri es espléndida, es una pareja destinada a entenderse aunque no quiera, y cada nuevo jugueteo en el que les coloca cada nueva trama no hace nada más que añadir interés a la historia y a los mismos personajes, a los que parece difícil no querer. Lo alternativo de este mundo le da unas oportunidades bárbaras, y resulta evidente que donde mejor las aprovecha es en el tercero de los álbumes que incluye este libro, Hollywood Boulevard, que juega con una soltura tremenda con el personaje de Marilyn Monroe y con las circunstancias que rodearon a su muerte… solo que, claro, esta no es exactamente Marilyn. Arleston tiene chispa para imaginar situaciones y sobre todo para que los diálogos funcionen con una precisión tremenda, pero no hay que restarle méritos tampoco en la construcción del universo que nos está enseñando, que tiene unas normas muy básicas que sabe explicar muy bien sin que interfieran para nada en las historias, sin perder un ápice de comicidad y sin que por ello se resienta el misterio que necesita toda historia de corte fantástico que tenga lugar en un mundo diferente al nuestro. La diversión, con todos estos elementos que detallamos, está más que asegurada en todos los álbumes de Ekhö.
Y si ahí nos falta algo, el dibujo de Barbucci es todo lo que necesitábamos para disfrutar al cien por cien con lo que vemos. Su caricatura es tan divertida y tan cinética que casi da la impresión de que estamos viendo una película de dibujos animados que de algún modo se ha trasladado a las páginas del libro. Sus personajes son imaginativos y divertidos con solo mirarlos, y la manera en la que ha recreado nuestro mundo de una manera tan atractiva es digna de mención. El mundo y sus personajes, claro, porque al final lo que le da a Ekhö un carácter especial son precisamente sus protagonistas, y el acierto en el diseño de todos ellos, en especial de Fourmille y Yuri, es superlativo. Sobre todo en el caso de su protagonista femenina, porque además tiene que mantenerla reconocible cuando cada uno de los muertos que se apodera momentáneamente de su cuerpo aporta una expresión facial y un movimiento corporal distintos a los que tiene la muchacha cuyas andanzas seguimos por este mundo espejo. Qué complicado resulta encontrar algún punto débil en esta serie tan divertida, en la que es una delicia perderse junto a Fourmille y Yuri en cada uno de los rincones que exploren, sea Nueva York, el mundo del espectáculo de París o los entresijos del Hollywood más luminoso y también del más turbio.
El volumen incluye los tres primeros álbumes de Ekhö Monde Miroir, New York, Paris Empire y Holywood Boulevard, publicados originalmente por Soleil en marzo y noviembre de 2013 y noviembre de 2014. El contenido extra lo forman las cubiertas originales de Alessandro Barbucci y un portafolio de bocetos e ilustraciones.
En nuestra galería de Facebook podéis acceder a todas las páginas que mostramos de todos los títulos que comentamos.