Guion: Shuji Sogabe.
Dibujo: Shuji Sogabe.
Páginas: 162.
Precio: 7,95 euros.
Presentación: Rústica con sobrecubierta.
Publicación: Julio 2019.
Entramos de la mano de Persona 3 en el eterno debate sobre las adaptaciones, en este caso de videojuegos pero en realidad de cualquier tipo de obra, sobre el público al que va dirigido. ¿Es para cualquier lector o es necesario tener un conocimiento previo de la historia que nos cuenta a través de sus precedentes para enterarse de todo sin problema? La respuesta no es nada sencilla, máxime si tenemos en cuenta que aquí estamos hablando de un videojuego que es spin off de otro, Megami Tensei, que además entramos en la tercera parte de la serie y que esa es justo la entrega en la que se complica la trama con elementos psicológicos de considerable calado. Por eso el manga es complicado para quienes no sepan qué es Persona. A veces incluso complicado en exceso. En otras palabras, en el debate del que hablábamos nos posicionamos en el grupo de quienes sí consideran necesario haber transitado por este mundo para comprenderlo o, al menos, para sacarle todo el jugo posible. También hay que tener en cuenta que estamos ante un primer volumen de los once que tendrá la serie, por lo que este hay que considerarlo como una introducción. Satisface esas necesidades de quienes se asoman sabiendo lo que buscan. Quienes no lo tengan claro, reciben una dosis de mucha adrenalina, un escenario intrigante y bastantes dudas.
La cuestión es que tenemos una base preexistente muy contundente y Shuji Sogabe quiere ser lo más fiel posible a la experiencia que plantea Atlus y, por tanto, al videojuego del que parte. Volvemos así a ese debate del que hablábamos al principio, un debate del que, en realidad, hay que tratar de prescindir. Si no se hace, se corre el riesgo de pensar que esta primera entrega de Persona 3 confunde más que entusiasma, a pesar de que sus grandes ideas se intuyen con relativa facilidad y se puede disfrutar, aún desde la falta de seguridad que puede generar el alto ritmo que plantea el manga. Ese es su punto fuerte, que no deja respiro y que en cada página se tiene la sensación de que puede pasar cualquier cosa de aquí en adelante. Y eso a pesar de que el primer segmento es precisamente donde más perdido se puede sentir el lector que se adentre en Persona 3 sin haber pasado por el videojuego. Luego se van aclarando algunos detalles, se van añadiendo personajes y el escenario de conjunto parece que va eludiendo la neblina que se va a encontrar el profano y encontrando así un camino propio en viñetas, incluso desde la mencionada fidelidad al videojuego. El escenario fantástico que tiene la historia se intuye cargado de imaginación, incluso aunque esté algo limitada precisamente por su carácter introductorio.
El dibujo de Shogabe busca esa misma adrenalina que tiene la historia. Importa más el impacto que una claridad meridiana, y, la verdad, no es una fórmula que le vaya mal porque suple las carencias que pueda sentir el lector no iniciado. A nivel visual, lo más atractivo es con diferencia lo bien que juega el mangaka con los negros, tanto en el interior de la escena como en los márgenes de la página. De lo que se trata, y eso lo consigue sin ningún problema, es de que nos sintamos dentro de un mundo muy psicológico en el que se mueven héroes y demonios con cierta naturalidad. Cuando se adentra en los terrenos de la espectacularidad es probablemente cuando más y mejor funciona su propuesta. También hay una lógica diferencia visual entre las secuencias más cotidianas y realistas y lo que tiene que ofrecer su faceta fantástica, lo que ayuda a entender el cambio de escenario y suma un acierto más a su propuesta. Persona 3, no obstante, tiene mucho más ritmo que respuestas a estas alturas de la serie, y es obvio que producirá más placer a quienes hayan cogido los mandos alguna vez de los movimientos de los protagonistas del videojuego, pero cumple con los propósitos de una adaptación y como base, eso sí pendiente de confirmar en muchos detalles, de una buena historia de ciencia ficción.
Atlus comenzó a publicar Persona 3 en 2007. No tiene contenido extra.

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