‘Star Wars. Una nueva esperanza’, de Roy Thomas y Howard Chaykin

Editorial: Planeta Cómic.

Guion: Roy Thomas.

Dibujo: Howard Chaykin.

Páginas: 128.

Precio: 20 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Septiembre 2019.

Cada vez que se reedita una clásica adaptación al cómic de una película llegamos a la misma conclusión: estos tebeos ya no se hacen como antes. Pasa con esta versión del primer Star Wars, ahora en formato remasterizado con un trabajo de color que seguramente no convencerá del todo a los puristas pero que se antoja necesario para un público más contemporáneo. Y pasa por una razón muy sencilla, los nombres de los autores que la hicieron, nada menos que Roy Thomas al guion y Howard Chaykin en el dibujo. También porque el Star Wars original de Marvel tiene un sabor especial. Comprar estos derechos fue una decisión decisiva para el turbulento Marvel de los años 70 y para que sus problemas financieros no fueran a más. Y no perdamos de vista lo bien que sabe levar Thomas los cartuchos de texto a la narración y la impactante puesta en escena de Chaykin para aportar algo complementario y no mimético de lo que nos enseña la película (aquí, su crítica). No es solo un tebeo de Star Wars, es además un buen tebeo de Star Wars, uno que ofrece la oportunidad de ver integradas en la historia algunas escenas eliminadas del guion original del filme o incluso un aspecto de Jabba diferente al definitivo, al de rodaje o al de la posterior Edición Especial. Son tantos los alicientes que tiene este libro que se convierte en algo obligatorio para cualquier aficionado.

Y eso tiene mérito, precisamente porque estamos hablando de una adaptación, con la casi absoluta desaparición de sorpresa que eso comporta. Thomas, en todo caso, ha dado a lo largo de su carrera muestras de tener una enorme capacidad para gestionar propiedades ajenas y en esta época podría haber escrito un tratado sobre este asunto. Eso hace que el Star Wars de Roy Thomas no pierda nada, ni siquiera una pizca, del dinamismo que siempre ha tenido el de George Lucas, lo cual dice mucho si tenemos en cuenta que estamos ante la aventura espacial definitiva para más de una generación. Y aunque algún diálogo pueda quedar aquí algo forzado para quien haya visto la película una y mil veces, el trabajo es sobresaliente. Y todo ello con una fidelidad casi reverencial al material de origen. Thomas tiene la cualidad de hacer que parezca que adora a los personajes que le toca manejar, con lo cual resulta indiferente que para él pueda ser un trabajo de aliño o uno con más significado personal. Para el lector desde luego, lo es, y Thomas de esta manera está ofreciéndole lo que busca con una elegancia tremenda. La verdad es que da gusto leer a Thomas haga lo que haga, pero con este tipo de material todavía más, sabiendo todos los condicionantes que tiene y unas limitaciones que para nada frenan su narrativa.

Además, Chaykin aporta lo suyo pasa que Una nueva esperanza sea un tebeo dinámico y entretenido que no tiene por qué vivir a la sombra de la película, sino desde una confortable posición complementaria. Chaykin sabe hacer espectaculares de una manera personal momentos que el cine tiene que mostrar de otra manera y con otro lenguaje. De ahí que sea un espléndido complemento y no el típico sacacuartos con el que se contenta a los seguidores de una franquicia. El ilustrador, aunque obviamente tiene que ceñirse a lo que aparece en la pantalla, tampoco se ve limitado por ello, y juega con muchos detalles, el aspecto de Darth Vader no es el mismo, apuesta por un Luke de corte más heroico clásico y no solo juvenil como en el filme, el movimiento de C-3PO es más amplio, y soldados imperiales y naves, tanto del Imperio como de la Alianza, lucen de una manera espléndida. Hay adaptaciones que buscan la copia de los actores, pero eso no va con Chaykin, que apuesta por su versión, por hacer Star Wars por supuesto con los diseños originales pero haciéndolos suyos en todo momento. Por eso es una adaptación tan bien, por el respeto a la referencia conjugado con la intención de hacer algo que aporte. Y lo hace. ¿El color? Lo dicho, habrá quien lo vea como una modernez innecesaria, pero hay que pensar que eso es lo que nos da la oportunidad de leerlo de nuevo.

El volumen incluye los seis primeros números de Star Wars, publicados originalmente por Marvel Comics entre abril y septiembre de 1977. El volumen incluye una introducción de Peter Mayhew, portadas e ilustraciones de Howard Chaykin, Arthur Adams y Adi Granov.

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