Guion: James Robinson.
Dibujo: Stephen Segovia, Emanuela Lupacchino, Rick Leonardi, Marc Laming, Frazer Irving, J. Calafiore, Jesús Merino.
Páginas: 96 / 120o.
Precio: 8,95 / 12,50 euros.
Presentación: Rústica.
Publicación: Diciembre 2018 / Febrero 2019.
James Robinson es uno de esos escritores a los que mucha gente se resistirá a poner un sobresaliente pero que siempre es capaz de aprobar con holgura, a veces incluso con nota. Su Wonder Woman, que prácticamente concluye con estos dos números, ha sido de lo más entretenida, con el sabor clásico que necesitaba el personaje después de cambiar radicalmente su escenario de la mano de Brian Axzarello y los Nuevos 52. Y el caso es que ha emprendido ese camino sin necesidad de rupturas traumáticas o grandes revelaciones, e introduciendo los elementos justos para que su idea avance. La clave es Jason, su hermano, que abre un escenario a la vez novedoso y reconocible en el que ha podido desarrollar una aventura que encaja con la reciente imposibilidad de localizar Themyscira, que nació en la segunda etapa de Greg Rucka al frente del personaje (aquí, reseña de su primer número), mucho más oscura que esta de Rbinson, y que se permite el lujo de contar con Darkseid como el gran villano al que oponerse y con unos nuevos dioses oscuros que permiten mezclar los conflictos personales de la amazona también con la Liga de la Justicia. Es decir, que espectáculo no le faltan a estos números, además de las necesarias dosis de mitología y de un buen desarrollo, aunque parezca algo sencillo, de Steve Trevor.
Robinson tiene claro que la mejor manera de hacer que Wonder Woman funcione es conjugando dosis notables de acción y aventura, el respeto a la tradición del personaje y elementos personales que hagan que cada aventura tenga altas dosis de sacrificio sin necesidad de tener que recurrir a un tono excesivamente adulto o incluso siniestro. La Wonder Woman de Robinson es, por encima de todo, épica. El número anterior (aquí, su reseña) nos dejó con la miel en los labios, en la antesala del enfrentamiento en combate de la amazona con Darkseid, y el resultado de aquel cliffhanger no decepciona en absoluto, aunque por el momento parezca abarcar demasiados escenarios que minimizan un tanto el combate central. Como tampoco decepciona la aventura siguiente, una en la que Diana vuelve a entrar en contacto con los Zafiros Estelares de Zamaron y la misma Liga de la Justicia. Y eso sin olvidar el interludio en el que la heroína vuelve a encontrarse con Cheetah. Sorprende lo fácil que Robinson consigue ir incluyendo elementos sin que tengamos la sensación de que se estén tocando de pasada o de manera superficial, porque todo esto suma más elementos de interés a la relación con Steve o con Jason, que al final es lo que ayuda al escritor a definir a la heroína más allá de la acción espectacular en la que envuelva su trayectoria.
Pero espectáculo hay, de eso no hay duda. Lo hay en el planteamiento de Robinson y también en la ejecución de sus dibujantes. Y eso que Wonder Woman parece haberse convertido en una de las series en más que mayor rotación de dibujantes se produce. Emanuela Lupacchino, con su siempre notable eficacia, se ocupa del enfrentamiento con Darkseid, con algo de ayuda se supone que para llegar cómodamente a los plazos de entrega. Stephen Segovia borda los combates de Wonder Woman primero contra la furia animal de Cheetah y después contra el ímpetu juvenil de Supergirl (dejando aquí viñetas absolutamente brillantes). Y es en Los Dioses Oscuros donde el baile de ilustradores se desborda, con Max Laming, Frazer Irving, J. Calafiore y Jesús Merino, espléndido como siempre, sumándose a los ya mencionados Segovia y Lupacchino, que vuelven a añadir páginas para esta despedida de Robinson. Dentro de un nivel bastante alto, las mejores páginas de estos dos volúmenes parecen las de Segovia. Robinson, en todo caso, puede estar más que contento con los ilustradores que están dando forma a su etapa porque todos, sin excepción aunque con los lógicos altibajos de tanto cambio, han entendido lo que hay que conseguir con estas historias. Esto es, un magnífico espectáculo protagonizado por una heroína bien escrita y descrita.
El volumen incluye los números 44 a 50 y el Annual 2 de Wonder Woman publicados originalmente por DC Comics entre abril y julio de 2018. El único contenido extra son las cubiertas originales de Carlo Pagulayan, David Yardin, Emanuela Lupacchino, Jenny Frison, Yasmine Putri, Jesús Merino y Stephen Segovia.

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