Guion: Jonathan Hickman.
Dibujo: Tomm Cocker.
Páginas: 240.
Precio: 22 euros.
Presentación: Rústica.
Publicación: Abril 2018.
Viendo el despiadado control que las altas esferas económicas ejercen sobre nuestras vidas, de manera particular sobre cada uno de nosotros y también sobre la sociedad en su conjunto, parecía cuestión de tiempo que Jonathan Hickman, uno de los grandes autores del momento que disfrutan con las tramas largas y truculentas, usara está cuestión como base para una serie. Los asesinatos del lunes negro arranca con sensaciones parecidas a las que Hickman suele buscar en sus series, empezando por la de saber que nos queda mucho recorrido para poder unir todas las piezas del deliciosamente turbio puzle que construye. Y aún así, cada secuencia tiene la virtud de intrigarnos, de introducirnos aún más en este mundo de sociedades secretas y misterios ocultos para entender las debacles de la economía moderna a partir del famoso crac de la bolsa de 1929. Hasta ahí se remonta Hickman para recordarnos, de una manera inteligente y desasosegante, sabiendo que nos está contando algo que nos afecta aquí y ahora, que estamos en manos de personajes siniestros, que son ellos los que dominan la economía y, por consiguiente, nuestras vidas. Puede que en la realidad no sean estos ni vivamos en ese entorno fantástico que sí tiene la serie, pero no cuesta nada imaginar que lo que vemos tiene cosas en común con lo que Hickman se saca de la chistera.
Con Hickman siempre hay que tener en cuenta el momento presente y el largo plazo. Parece una obviedad, pero no todo el mundo ejecuta esa forma de entender las historias de la misma manera y es bueno advertirlo para evitar frustraciones por unas conclusiones que siempre van a tardar en llegar. Dicho esto, el mimo con el que Hickman construye el relato impresiona. Hay, como en todos sus trabajos, una meticulosa labor de planificación. Solo de esa manera se puede entender la forma en la que juega con distintos escenarios temporales y multitud de personajes, tantos que ha de listarlos previamente a la manera del teatro clásico. El largo plazo es lo que enganchará a quienes ya conozcan a Hickman y a quienes se hayan aproximado a Los asesinatos del lunes negro por su temática de fondo. El corto plazo es lo que termina de convencer a cualquier otro tipo de lector. El escritor nos deja, como por otra parte es habitual, diálogos finos y precisos, de esos que merece la pena leer más de una vez y de forma detenida y atenta, porque más allá de su contundencia verbal instantánea siempre dan la sensación de tener mucho más significado. Da gusto leer una serie en la que siempre parece que cada palabra, cada conversación, cada personaje y cada escenario tiene importancia, incluso aunque no se vea de inmediato.
Hickmam, además, ha encontrado en Tomm Coker un aliado de primer nivel para que Los asesinatos del lunes negro funcione a todos los niveles. Los saltos en el tiempo que le propone el escritor encuentran muy buenas soluciones en sus lápices. A veces no hace falta ni el cartucho de texto que nos ubica en el tiempo en el que estamos porque el dibujo, con el detalle que le pone Cocker, es suficiente para sentir ese cambio de año. Sus personajes, levemente digitales en algún momento también por el color de Michael Garland, tienen una expresividad muy alta, y eso ayuda a que se respire tensión y emoción cuando la historia lo necesita. Aunque sea un comic en color, Cocker piensa en blanco y negro, dando un toque clásico a la historia de una manera elegante y precisa. Y, sobre todo, da a los personajes una personalidad intensa y marcada, potenciando todo lo que propone Hickman. Nadie dijo que series como Los asesinatos del lunes negro sean fáciles de leer, pero por eso mismo la satisfacción que dejan es tan alta. En este caso, es justo eso lo que se siente, por un tema fascinante, por unos personajes intrigantes y por una narrativa apabullante de principio a fin. Un arranque formidable para una serie que promete muchísimo. Como siempre con Hickman. Ahora, a confirmarlo con la siguiente entrega.
El volumen incluye los cuatro primeros números de The Black Monday Murders, publicados originalmente por Image Comics entre agosto y noviembre de 2016. El único contenido extra son las cubiertas originales.
En nuestra galería de Facebook podéis acceder a todas las páginas que mostramos de todos los títulos que comentamos.