‘Faith’ 5, de Jody Houser, Pere Pérez y Marguerite Sauvage

Editorial: Medusa.

Guión: Jody Houser.

Dibujo: Pere Pérez y Marguerite Sauvage.

Páginas: 32.

Precio: 2,50 euros.

Presentación: Grapa.

Publicación: Septiembre 2017.

La miniserie original de Faith fue un notable soplo de aire fresco. Primero, porque Jody Houser supo tomarse en serio a un personaje que, por desgracia y por la tiranía del canon único de belleza, puede caer en lo caricaturesco. Segundo, porque supo mezclar la realidad y la fantasía personal dentro del mismo relato superheroico que cuenta, consiguiendo que nuestra protagonista sea tan heroína como persona. En solo cuatro números (aquí, reseña del primero), Faith, nótese la sutileza de utilizar como título el nombre civil y no el de justiciera, se convirtió en una lectura muy agradable. Se agradece que Valiant quisiera dar continuidad a esos logros con una serie regular que, aunque aquí en España sea el número 5, tiene aquí su primer número. La advertencia es importante, sobre todo porque es un primer número en toda regla, con un largo recordatorio de quién es nuestra protagonista, cómo se convirtió en superheroina y todos los avatares que le han sucedido, incluso antes de la mencionada miniserie. La conclusión es que casi no pasa nada prácticamente nuevo. Hasta que pasa. Y entonces Houser nos recuerda con contundencia por qué nos gustó tanto la miniserie de Faith. Porque es un cómic de género en toda regla pero al mismo tiempo trata de problemas y cuestiones de lo más terrenales.

El gran acierto, habría que decir del final de este primer número, está en que conecta las secuencias de fantasía con la realidad de Zephyr con una facilidad asombrosa. Solo hemos visto ese impactante momento, un cliffhanger que nos obliga a seguir leyendo el próximo número, pero con eso basta. El resto, hay que reconocerlo, es paja dulce. Paja porque no hay nada nuevo pero dulce porque el personaje gusta y convence. Y aunque cambia el dibujante principal, Francis Portela cede los lápices a Pere Perez, el nivel se mantiene, con la ayuda además de que la secuencia de fantasía sigue siendo obra de Marguerite Sauvage, lo que aporta una agradable conexión con lo que ya hemos leído. Pérez se vuelca más en los personajes que en los fondos, probablemente el aspecto menos conseguido de sus páginas, y eso refuerza la empatía que genera la serie. Buenas perspectivas y escorzos para un personaje que, precisamente por presentar un físico poco habitual en el género, supone todo un reto del que el autor sale más que airoso. Faith sigue mereciendo atención. Se le perdona el hecho de que haya caído en el tópico del primer número para reunir nuevos lectores por el hecho de que sigue sabiendo tratar a una heroína atípica por razones que exceden el aspecto físico de la protagonista. Faith no es solo eso, no nos quedemos ahí.

Valiant publicó originalmente el primer número de la serie regular de Faith en julio de 2016. No tiene contenido extra.

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