‘Batman eterno’ 10 y 11

Editorial: ECC.

Guión: Scott Snyder, James Tynion IV, Ray Fawkes, Kyle Higgins y Tim Seeley.

Dibujo: Félix Ruiz, Davide Furnò, Paolo Armitano, Joe Quiñones, Goran Sudzuka, Jed Dougherty, Roger Robinson, David Lafuente, ACO, Javi Fernández, Alessandro Vitti, Christian Duce, Ronan Cliquet y Juan Ferreyra.

Páginas: 112 / 96.

Precio: 11,50 / 8,95 euros.

Presentación: Rústica.

Publicación: Julio / Agosto 2015.

Llegados ya al penúltimo episodio, Batman eterno pierde gas en su interminable reunión de villanos con uno por encima de todos ellos en la sombra, pero cobra fuerza, por estos números y en realidad por todo el desarrollo de la serie, por la presentación de nuevos personajes y un escenario atractivo en el que se pueden mover. Es evidente que uno de los puntos álgidos del relato fue el regreso de Spoiler a la continuidad, también la entrada de Julia Pennyworth, y ahora es igualmente atractiva la introducción de Bluebird. Son personajes, no por casualidad todos ellos femeninos, que se han podido fraguar con calma en este escenario caótico que está suponiendo Batman eterno, y han conseguido apoderarse de buena parte del interés en su desenlace. Scott Snyder y James Tynion IV, orquestadores del evento, lo han alargado demasiado. Es difícil asimilar un año de clímax continuo en las aventuras de Batman, y esta serie es justo eso. Un villano, otro, otro, otro y otro, y Batman perdido sin saber por dónde le vienen los golpes pero superándolos gracias al incremento de miembros de la Batfamilia. Hay demasiado en los once números que ya se acumulan de Batman eterno y demasiadas promesas para el final que, probablemente, no podrán verse satisfechas en ese momento y sí con el recorrido de lo que se ha venido planteando aquí.

Al final, el valor de los héroes está pesando más que el de los villanos en Batman eterno. Y, en realidad, no el de los héroes conocidos, sino el de los nuevos. Es verdad que todos han tenido su momento, y cabe destacar la trama en la que Batgirl se enfrenta a la situación de ver al comisario Gordon encarcelado (algo que, por cierto, se ha dejado un tanto de lado en este segmento de la historia), pero han destacado mucho más personajes como los mencionados. No es tampoco casualidad que Spoiler y Bluebird se crucen y hasta crezcan juntas como personaje en estos dos números de la edición española. Desde luego, la parte final de la serie está creciendo gracias a ellas y la relación que se está estableciendo con Batman, superando a la Batfamilia tradicional, y desde luego a los villanos, que se están convirtiendo en lo más rutinario de la serie. Al principio la idea de ir viéndolos a todos, desfilando por esta prueba de fuego definitiva para Batman, era atractiva. Mucho, de hecho. Pero con el paso de los números ese interés se ha perdido. Ni siquiera la aparición de Ra’s Al Ghul en el undécimo número español, que sí sirve para dar sentido al título y al arranque de la serie, revitaliza del todo ese propósito. Pero el entretenimiento, con todo, está más que servido desde el principio y se mantiene hasta este punto.

Parte de esa espectacularidad reside en la amalgama de ilustradores que sigue desfilando por la serie, nada menos que catorce para apenas nueve números americanos. Sigue sin ser una buena noticia ese exagerado baile, pero al menos da para contemplar una enorme variedad de interpretaciones de Batman y su mundo. Ese es el consuelo, el de ver, por ejemplo, el número que dibuja Joe Quiñones en la décima entrega o el de ACO en la undécima, muestras de que no hay un estilo determinado en la serie ni tampoco un modelo al que acercarse. A diferencia del estilo más homogéneo que se está buscando en los otros dos eventos semanales de DC, El fin del mañana y Tierra 2. El fin del mundo, Batman eterno busca artistas diferentes que aporten su visión a los mitos del Caballero Oscuro, y por eso es una fuente visual mucho más rica que aquellos títulos. Irregular también, claro está, pero en esa rotación se mantiene la espectacularidad que requiere la serie además del carrusel visual que proporciona. No lo hace de manera ideal, cerrando episodios con ilustradores concretos, pero algo es algo. Y así, Batman eternos llega casi al final. La intriga por la identidad del villano en la sombra ya casi es lo de menos llegados a este punto, pero la proliferación de personajes hace que haya bastante interés en muchas subtramas. Veremos si el final redondea la obra.

El décimo número de Batman eterno incluye los números 39 a 43 de Batman Eternal y el undécimo los números 44 a 47, publicados todos ellos originalmente por DC Comics entre diciembre de 2014 y febrero de 2015. El único contenido extra son las cubiertas originales de Tommy Lee Edwards, Ivan Reis, Ethan Van Sciver y Jae Lee.