Guión: John Barber.
Dibujo: Andrew Griffith.
Páginas: 208.
Precio: 18,95 euros.
Presentación: Rústica.
Publicación: Febrero 2015.
Pocas franquicias de la ciencia ficción popular han sido tan claras como Transformers en cuanto a la alineación de sus personajes. Buenos y malos, Autobots y Decepticons, con un movimiento muy complejo de producirse entre unos y otros. ¿Pero qué sucede cuando los bandos se dinamitan y se abre una etapa totalmente nueva? Eso, que se empezó a contar en Transformers. More Than Meets the Eye (aquí, reseña de su primer número), se explicita aún más en esta serie que acontece al mismo tiempo, Robots in Disguise. Lo verdaderamente interesante del planteamiento de John Barber, guionista de la serie, es la transgresión de los límites morales de los personajes. Hay en ella muchos Autobots que no son tan buenos y muchos Decepticons que no son exactamente tan malos como cabría esperar. O que tienen planes diferentes a la destrucción masiva que provocó la guerra en Cybertron. Y eso es lo que permite que la historia sea una sorpresa continua, porque el lector no sabe cuál será el siguiente movimiento de cada personaje. Eso y el ambiente político y social de esta etapa de postguerra que se muestra. Añadiendo el brutalmente espectacular dibujo de Andrew Griffith, se puede concluir que estamos ante un momento extraordinario para introducirse en la franquicia Transformer, por mucho que pueda costar la comprensión de algún detalle de continuidad o reconocer a algún personaje.
Aunque sea algo que viniera dado por las etapas anteriores, se agradece que este salto al futuro se haga de la mano de personajes más conocidos. El protagonismo de Bumblebee, Prowl, Starscream, Ironhide o Wheeljack se antoja imprescindible como guía, bien para lectores ya tradicionales de Transformers como para quienes quieran apostar por sus aventuras en esta nueva etapa. Como son personajes conocidos, es más fascinante comprobar cómo han cambiado, cómo han dejado de ser buenos o malos irredentos. De hecho, lo más interesante es ver cómo manejan los Autobots una situación tantas veces impensable, y es el manejo del poder. Sus decisiones para mermar a los Decepticons o para que estos no tengan las mismas posibilidades de alcanzar cuotas de poder en el planeta distan mucho de la corrección ética de la que siempre han hecho gala. Y eso, aunque sea un shock para aficionados veteranos, es fascinante de ver. Como también lo es la decisión de Barber de ir rotando el narrador de su historia, lo que ofrezca una multiplicidad de puntos de vista y una riqueza que se agradece precisamente porque ya no es tan fácil agrupar a los protagonistas en bandos cerrados. Y lo mejor es que no es una pose de autor, sino que los propios protagonistas hacen notar que se están dando cuenta de todos los cambios que están viviendo.
Lo que no cambia, no puede hacerlo en Transformers, es la acción desbocada. Estos robots transformables son guerreros y por eso las escenas de acción son espectaculares. Tienen que serlo. Y dar con un dibujante que las entienda, que las haga comprensibles y que maneje a la perfección los diseños de cada personaje, es una apuesta ganadora. Anfdrew Griffith es esa apuesta ganadora. Entiende la épica, pero también la política. Domina los diseños de los Transformers, pero también la narrativa con independencia de las características de sus protagonistas. Y asimila extraordinariamente bien los sutiles cambios en la apariencia de los protagonistas, que han dejado atrás sus modos terrestres para recuperar los diseños de Cybertron, para que sean al mismo tiempo reconocibles y modernos. Hay pocos reproches que hacer a Griffith y su dibujo es una de las razones por las que Robots in Disguise se puede disfrutar tanto desde las dos ópticas posibles. Por un lado, es el tebeo de ciencia ficción espectacular y entretenida que se presupone, y por otro es una nueva forma de ver el universo Transformer. Y como tanto esta serie como More Then Meets the Eye llegan en un punto en el que la franquicia cinematográfica ha apostado ya sin vuelta atrás por una empobrecimiento de los guiones y por un aspecto visual indescifrable, ambos cómics se reciben con mucho más agrado.
El volumen incluye los números 1 a 5 y 7 a 9 de The Transformers: Robots in Disguise, publicados originalmente por IDW entre enero y septiembre de 2012. El contenido extra lo forman una introducción de John Barber y una galería de portadas originales y alternativas de Marcelo Matere, Andrew Griffith, y Casey Coller.