Guión: Stan Lee.
Dibujo: John Romita, Ross Andru y Larry Lieber.
Páginas: 608.
Precio: 39,95 euros.
Presentación: Cartoné.
Publicación: Mayo 2012.
Si hay un Spiderman auténtico, es éste. El de Stan Lee y John Romita. Sin desmerecer en absoluto el trabajo de Steve Ditko como cocreador del personaje, la forma en la que Romita dibujo no sólo al Trepamuros sino a todos los demás personajes de su universo es la que perdura en la mente de incontables aficionados que leyeron aquellas historias en su momento y durante bastantes más años y la que, además, se ha colado como la versión más reconocible en el imaginario popular de varias generaciones. Las apariciones más memorables de algunos de sus villanos más emblemáticos, desde el Duende Verde hasta el Doctor Octopus, pasando por Kraven, Rino o el Lagarto, se produjeron aquí. La verdadera dimensión de los problemas que hacían de Peter Parker un chaval desdichado pese a sus poderes arácnidos se ve en estos números, con sus problemas económicos, las enfermedades de la tía May, las tiranteces con Harry Osborn y Flash Thompson o sus problemas amorosos con Betty Brant, Gwen Stacy y Mary Jane Watson, cuya memorable presentación se produce, efectivamente, en estas páginas. Y, en realidad, pocos Spiderman son más reconocibles que el de Romita. Por eso, este volumen es imprescindible, una joya, historia del cómic.
Lee y Romita arrancaron con una fuerza descomunal, con el Duende Verde descubriendo la identidad secreta de Spiderman. Las apuestas siempre fueron así de altas en la serie durante la etapa de estos dos genios creadores. El moderno cómic de superhéroes, el que desarrolló Marvel para superar claramente a DC en la segunda mitad de los años 60, tiene aquí su quintaesencia. Y por si falta algún ingrediente, en el interior de este memorable libro está el mítico número 50 de The Amazing Spider-Man, El fin de Spiderman, una historia inolvidable desde su espectacular cubierta y que en apenas veinte páginas se convierte en la mejor demostración de lo que es y de lo que llegar a ser este personaje. Se pueden destacar muchos elementos históricos y editoriales que permitieron que esta etapa fuera una realidad, como hace Raimón Fonseca en los artículos que van completando el libro, y éstos son los que dan una dimensión de verdadera trascendencia a estos relatos. Pero también hay que decir que leídas hoy, estas historias siguen teniendo la misma fuerza, emotividad y diversión que cuando fueron publicadas por primera vez. Y es que, entre tantos momentos únicos, ¿quién puede resistirse entre ellos al mítico «¿Sabes, Tigre? ¡Te acabo de tocar la lotería» de Mary Jane?
Estas páginas van relatando, con un envidiable sentido del entretenimiento, cómo se va forjando y evolucionando la galería de villanos de Spiderman, cómo Peter va creciendo y madurando, cómo se va enamorando de la irresistiblemente encantadora Gwen sin poder dejar de lado a la imparable Mary Jane, los celos de ambas pugnando por el corazón de Parker, la preocupación del muchacho por su tía May y la forma en que esos sentimientos tienen que compatibilizarse con la responsable obligación que tiene de ser Spiderman para ayudar a los demás, incluso aunque el siempre inagotable J. J. Jameson dedique su periódico día tras día a difamar sin pruebas al héroe enmascarado. Lee y Romita hacen realidad todo lo que se les pasa por la imaginación, y alimentan de esa forma la de los lectores, que irremediablemente, y por utilizar un juego de palabras facilón, caen en las redes del indiscutible encanto de un personaje maravilloso y que aquí estaba todavía forjándose. Y como son tantas las historias, las horas de disfrute que proporciona este libro son muchísimas y valiosas. Días de gloria, que ese es el título que recibe, es un maravilloso viaje a la infancia para unos y un descubrimiento casi obligatorio para otros. Una maravilla en todo caso.
El volumen incluye los números 39 a 58 de The Amazing Spider-Man, publicados originalmente por Marvel Comics entre agosto de 1966 y marzo de 1968, el número 1 de Spectacular Spider-Man, de ju julio de 1968 y material del número 6 de Not Brand Echh, de febrero de 1968 y el Annual 4 de The Amazing Spiderman, de noviembre de 1967. El libro incluye varios artículos de Raimón Fonseca explicando la trascendencia de estos números y diverso material de la época, incluyendo bocetos, anuncios o ediciones españolas, además de las cubiertas originales de John Romita. Esta edición de Panini forma parte de la colección Marvel Gold.