‘Conan. La leyenda’ 2, de Kurt Busiek y Cary Nord

Editorial: Planeta DeAgostini.

Guión: Kurt Busiek.

Dibujo: Cary Nord, Thomas Yeates y Tom Mandrake.

Páginas: 176.

Precio: 18,95 euros.

Presentación: Cartoné.

Publicación: Mayo 2011.

El segundo número de Conan. La leyenda, la recopilación de la colección que Dark Horse editó sobre el personaje creado por Robert E. Howard, contiene la presentación del principal enemigo de Conan en su mitología, Thoth-Amon. Además, se estrena aquí la bella e intrigante Janissa. Y es quizá el primer error de Kurt Busiek en la serie. No porque el personaje lo sea en sí mismo, sino porque es una inclusión fácil, deudora de su tiempo (no parece haber serie actual en la que no haya una mujer de indudable atractivo sexual que se convierta en el igual del protagonista en el campo de batalla), pero que rompe de alguna manera el tono de las aventuras del cimmerio. El soberbio trabajo de Cary Nord al dibujo, aunque se vea obligado a contar con la colaboración de Thomas Yeates y Tom Mandrake, hace que este mínimo desliz se vea de una forma amable, porque las formas y los movimientos que da a Janissa son tan espectaculares como la presentación de Thoth-Amon. En conjunto, este segundo número de la colección no es tan deslumbrante como el primero, pero sí imprescindible para los completistas de las aventuras de Conan y los amantes del cómic de fantasía heroica.

Con la idea de realizar una cronología más o menos definitiva para Conan, Busiek escribe las nuevas aventuras del personaje alrededor de la adaptación de un nuevo relato de Robert E. Howard, El dios del cuenco, que da título a este segundo volumen de Planeta DeAgostini. Su relato se va gestando en todas sus páginas, pero se adapta específicamente en los números 10 y 11. Es la presentación de Thoth-Amon, “el más poderoso nigromante del anillo negro”, como se le describe en esta historia. Busiek sigue ofreciendo guiones tan fluidos, entretenidos y llenos de aventura de fantasía como en los primeros números de la serie de Dark Horse. Poco a poco va perfilando a Conan como lo que es, un bárbaro de carácter noble, pero impaciente y belicoso, capaz de emprender los más peligrosos caminos con tal de tener el estómago lleno y la bolsa repleta de monedas, mujeriego y bárbaro en todos los aspectos de su carácter. El guionista le da al protagonista grandes momentos de diálogo y le rodea de espléndidos personajes secundarios para que el cimmerio pueda brillar.

La caracterización de Thoth-Amon es tan brillante como aterradora y su presentación se hace con un suspense formidable. Se le ve en su encarnación definitiva (visualmente mucho más cruda que la que se ofreció en la etapa de Conan que publicó Marvel Comics), y se le ve a través de la manifestación de su poder. De esta forma, éste es un magnífico primer plato de este clásico duelo entre el malvado hechicero y Conan que tantas historias ha protagonizado a lo largo de los años. Estos números también suponen también la presentación de Janissa, una concesión excesiva que no impacta de un vistazo pero que argumentalmente no encaja igual de bien. Es una hermosa joven cuyas habilidades de combate están a la altura del mismísimo Conan y que tiene una trágica historia. Una misteriosa mujer, la Huesuda, promete convertirla en guerrero a cambio de sus servicios el doble de tiempo que dure su entrenamiento. Y éste es brutal e inmisericorde. Consiste en enfrentarse a unas repulsivas criaturas. Día tras día pierde y es salvajemente violada por estos seres. Hasta que el entrenamiento da sus frutos y acaba venciéndoles.

Con portadas originales de, Leinil Francis Yu, Cary Nord sigue al frente del dibujo de las historias. Sin embargo, no pudo asumir en solitario la carga de trabajo que suponía esta serie mensual de Conan, por lo que contó con la colaboración de otros dos ilustradores en los números que forman este volumen. Con Thomas Yeates completó los números 9 a 13 de la serie original, mientras que en el último de los que se incluye en este libro, el 14, se sumó además Tom Mandrake. El resultado de este trabajo a tres manos, aún siendo espectacular, se resiente con respecto a lo visto en las primeras historias, aunque, con todo, este relato ofrece momentos visualmente muy impactantes. Sigue siendo destacable la labor del colorista Dave Steward. En la presentación de Janissa, Cord ofrece un cuerpo femenino ágil, atlético, casi vaporoso, llevando las coreografías de lucha a la excelencia artística. Lo mismo consigue en el duelo entre Conan y la hermosa mujer o en las primeras manifestaciones mágicas de Thoth-Amon.

Este segundo volumen de Conan. La leyenda incluye material original de los números 7 (el prólogo de la historia) y 9 a 14, publicados por Dark Horse entre agosto de 2004 y marzo de 2005, además de algunas viñetas del número 0, recolocadas en las cuatro primeras páginas del libro a modo de introducción de las aventuras del bárbaro cimmerio. El libro se completa con una introducción a cargo del editor de la serie norteamericana, Mike Richardson, y un artículo final de Mark Finn sobre Robert E. Howard. Este texto se acompaña de los bocetos de Nord para los dos personaje que, junto a Conan, dominan la historia: Thoth-Amon y Janissa.